top of page

Todo lo que nos sucede es el resultado de algo que pensamos, de algo que hicimos o de algo que dijimos, es decir, funcionamos como imágenes de finales de historias que nosotros mismos contamos. El conflicto está cuando cada factor suena en un compás diferente. Si atraemos unas cosas con nuestros pensamientos, otras con nuestros actos y otras totalmente dispares con nuestras palabras, volvemos loca perdida a la vida.

La armonía entre ellos es esencial, son la base pesada y gruesa que afecta a todo lo que nos ocurre. Así que, si cuando consigas que se equilibren escuchas un ruido en tu cabeza, no te asustes, son los archipiélagos de la sinceridad llamando a tu puerta, que tienen un frío que pela afuera y ya es hora de que entren.

Sin título-9.jpg

A VECES SOBRAN

Aprendí que por mucho amor que tengamos

a las seductoras palabras,

a veces, sobran.

Hay cosas que se leen mejor entre líneas

y palabras que se miran, 

sin ser mencionadas.

A veces sobran, porque un acto vale más

que mil intencionadas.

Por las manos confesoras de toda acción,

por las bocas que se mueven en forma de reacción.

Palabras que sobran,

miradas que miran,

y también

tocan.

bottom of page